En los últimos tiempos, la mayor versatilidad y variedad que ofrecen las plataformas digitales ha permitido que podamos disfrutar de productos impensables hace tan solo una década. Y es que este tipo de servicios se ofrecen en suscripción para usuarios interesados en el contenido original, y si cuentan con el suficiente apoyo, pueden centrarse en un nicho muy concreto. De hecho, hay plataformas de streaming centradas en el terror, en las telenovelas latinas o en el contenido erótico. Este último es especialmente importante, ya que mueve mucho dinero en su versión online. En apenas un par de décadas hemos pasado de comprar DVDs físicos con las mejores escenas de una actriz a disfrutar de ellas en Internet, prácticamente con todo el porno del mundo a nuestro alcance, y de manera gratuita. La revolución también ha traído consigo un cambio en la industria. Ahora ya no se ruedan películas, sino pequeñas escenas o cortos.

Es lo que el usuario busca en esta era en la que todo tiene que ser más breve, más rápido, más directo. En 2003 las cosas eran muy distintas. Las principales productoras buscaban proyectos ambiciosos, empujadas por la masiva venta de material pornográfico en formato físico. Internet ya estaba en plena expansión, pero el trasvase de la era analógica a la digital todavía debía completarse antes de que la revolución virtual explotara. Eran buenos tiempos para la industria, que trataba de modernizarse al abrigo de una sociedad mucho más abierta sexualmente. Y entre las estrellas que brillaban con luz propia en aquella época había una que destacaba por su belleza exótica y fascinante. Sunny Leone surgió como una auténtica sorpresa, siendo en su momento una de las pocas chicas de origen indio que trabajaba en la industria. Con una carrera centrada primero en las escenas lésbicas, su estreno en una escena con un chico fue todo un acontecimiento para el porno de mediados de los 2000. La chica disfruto de una carrera larga y provechosa, pero luego se reinventó de una manera sorprendente, buscando sus raíces. De todo ello y de mucho más se habla en el interesantísimo documental Mostly Sunny.

Un proyecto muy especial

En el año 2016, ya con las plataformas de streaming a pleno rendimiento, el productor y director de origen hindú Dillip Mehta presentó un documental llamado Mostly Sunny. Esta producción se centraba en la historia de la actriz Sunny Leone, desde su nacimiento en Canadá a su éxito en el cine de Bollywood. El documental venía empujado por una corriente popular en la que en años anteriores se habían presentado diferentes producciones comerciales enfocadas en el porno.

El tabú sobre el cine X estaba desapareciendo, y las estrellas de la industria querían mostrarse más humanas, más cercanas. Leone dejó de rodar escenas pornográficas en 2014, para centrase en su nueva etapa en el cine hindú. Este proyecto recoge no solo esa transición, sino también toda la historia vital de un actriz que marcó un hito en los años 2000.  

Sunny Leone, una gran estrella porno

Nacida en Ontario, Canadá, en el seno de una familia punyabi, Karenjit Kaur Vohra fue criada en una escuela católica, a pesar de sus raíces hindúes. Ella misma reconoce que se siente muy orgullosa de sus orígenes, y que trata de mantenerse cerca de esa tradición todo lo que puede. Tras mudarse a Estados Unidos con toda su familia cuando era una adolescente, Sunny comenzó a posar como modelo apenas cumplió la mayoría de edad. Su belleza destacaba entre las chicas de su entorno, y llamó la atención de varios fotógrafos y productores. Aparecer en la revista Penthouse y convertirse en Pet of The Yearen 2003 cambió para siempre su vida. Decidió enfocar su carrera al contenido erótico, a pesar de las críticas que recibió dentro de su propia comunidad.

Sus padres no veían con buenos ojos que se dedicara al mundo del sexo, pero ella siguió adelante con la decisión. Ya con el nombre de Sunny Leone, firmó un contrato con Vivid Entertaiment, una de las mayores productoras de la industria. Sus primeras películas fueron exclusivamente con otras chicas, ya que sentía que debía recorrer su propio camino a la hora de hacer porno. Ya en 2007 comenzó a rodar escenas con hombres, aunque en exclusiva con su marido, Matt Erikson. En aquellos años, Leone se convirtió en una de las pornstars más deseadas, participando también en videoclips, películas comerciales y entregas de premios de la MTV. Durante sus últimos años de carrera, ya sin exclusividad con Vivid, la actriz desarrolló escenas con otros compañeros del mundillo y se lanzó también a dirigir. Pero en 2011, cuando cumplió 30 años, Sunny decidió dar un giro a su carrera para acercarse aún más a sus raíces.  

Su segunda vida en Bollywood

La actriz participó en el programa hindú The Big Boss, un reality a la manera de Gran Hermano, en el que estuvo varias semanas, revolucionando por completo el formato. Sus compañeros, que no la conocían, fueron informados de que era una actriz y modelo con éxito en Estados Unidos. Leone no mencionó sus películas pornográficas, aunque evidentemente, fuera de la casa aquello era vox populi. Estando en el programa, la chica recibió una oferta para participar en una producción india. Fue su primer paso dentro de Bollywood, un cine al que siempre había querido acceder. Ese mismo año rodó también otra película dentro de la industria de cine hindú, siendo un auténtico éxito en taquilla.

Desde ese momento, Sunny compagina su vida en Estados Unidos con el éxito en Bollywood. Después de retirarse del porno en 2014, la chica ha podido disfrutar de una vida más tranquila con su esposo y sus hijos, viviendo en California, y viajando a la India para participar en numerosos proyectos. Tras la salida del documental, Leone acaparó de nuevo la atención de todos, ya casi por nostalgia, habiéndose convertido en uno de los grandes mitos eróticos de los 2000. Su carrera en el porno estuvo plagada de premios y consiguió ser una de las actrices más destacadas de su generación, y una pionera como mujer punyabi dentro de la industria. Con 54 millones de seguidores, Leone es una de las pornstars más populares de Internet.

Dónde puede verse Mostly Sunny

El documental Mostly Sunny fue lanzado para mostrar una imagen  mucho más cercana de la actriz porno, con una carrera brillante y muy especial. La crítica no recibió demasiado bien el lanzamiento, tachándolo de superficial e impostado.

Sin embargo, los fans de la actriz agradecieron que la ex pornstar apareciera de esa manera tan real y auténtica ante las cámaras. El documental puede encontrarse por Internet, aunque actualmente no hay ninguna plataforma de streaming que lo tenga en su catálogo, al menos en Argentina. Su tráiler sí que puede visionarse en Youtube y cualquier otra videoteca online, para al menos tener un poco de lo que ofrece esta producción.